En la era digital en la que cada vez estamos más inmersos, creatividad e innovación son fundamentales para alcanzar el éxito, tanto de un negocio, como a nivel de un país.
- Conoce cuáles son los países más innovadores del mundo, la situación que ocupa España en el ranking mundial y dentro de la UE y cómo podemos mejorar nuestra posición.
- Además, te explicamos las diferencias entre creatividad e innovación.
España es un país innovador y creativo, lo es ahora y lo ha sido históricamente. Sin embargo, en lo que respecta a innovación, la revista económica Bloomberg nos sitúa en el puesto 31 de su clasificación anual sobre las economías más innovadoras del planeta.
Nos encontramos justo por detrás de Grecia y un puesto por delante de Rumania, muy lejos del top ten de los países más innovadores. Entre los que, por cierto, no se encuentra EEUU, que ocupa el undécimo lugar.
¡COMPARTE! ¿En qué lugar se encuentra España en el ranking de los países más innovadores del mundo?
Según el índice de innovación de Bloomberg de 2021, los diez países más innovadores, por este orden, son:
- Corea del Sur
- Singapur
- Suiza
- Alemania
- Suecia
- Dinamarca
- Israel
- Finlandia
- Pises Bajos
- Austria
En lo que respecta al registro de patentes, aún ocupamos una posición peor, ya que caemos hasta la posición 37, justo por delante de Malta, y en lo relativo a la densidad de empresas de tecnología, ocupamos el puesto 38, justo detrás de Bulgaria.
Fortalezas del ecosistema de I+D+i para invertir en España
Invertir en innovación, en España, tiene muchas ventajas. Entre ellas se encuentran:
- Deducciones fiscales y a ayudas a actividades de I+D+i.
- La innovación abierta está en auge, liderada por las grandes compañías.
- El ecosistema innovador está creciendo, lo que se refleja en el aumento de los registros de patentes.
- Existe un entorno favorable para la contratación de talento.
- Hay un entorno seguro que defiende la propiedad intelectual.
¿Qué posición ocupa España en el cuadro europeo de indicadores de creatividad e innovación?
El cuadro europeo de indicadores de la innovación ofrece una evaluación comparativa de los resultados en materia de investigación e innovación de los Estados miembros de la UE. En 2022, España no ocupa un buen lugar en este cuadro, ya que se encuentra dentro del grupo innovadores moderados.
Mediante un indicador compuesto, el Índice Sintético de Innovación, se calculan los valores medios de los resultados de los Estados miembros. Lo que permite clasificarlos en cuatro grupos:
- Líderes en innovación. Dinamarca, Finlandia, Bélgica, los Países Bajos y Suecia, tienen unos resultados muy por encima de la media de la UE. Suecia es el país líder en innovación dentro de la UE.
- Innovadores fuertes. Dentro de este grupo se encuentran Alemania, Austria, Luxemburgo, Chipre, Francia e Irlanda, que tienen unos resultados superiores o próximos a la media de la UE.
- Innovadores moderados. En este grupo se encuentra España, junto con Chequia, Estonia, Portugal, Eslovenia, Grecia, Italia, Lituania y Malta. Este grupo se sitúa por debajo de la media de la UE.
- Innovadores emergentes: Aquí se encontrarían países como Croacia, Eslovaquia, Letonia, Polonia, Hungría, Bulgaria y Rumanía, cuyos resultados son muy inferiores a la media de la UE.
¿Qué puede hacer España para mejorar en innovación?
En los Presupuestos Generales del Estado se está impulsando la competitividad a través de la innovación, la investigación y el conocimiento de las áreas emergentes. Por ello, en los PGE de 2023, se incrementará, una vez más, la partida destinada a Ciencia.
En línea con los planes estratégicos y objetivos planteados tanto en el ámbito europeo como los transpuestos a España, la idea fundamental es que se cree el entorno para que «las ideas innovadoras se transformen en productos y servicios» que lleguen al mercado. Para alcanzar este objetivo, se debe:
- Realizar importantes reformas.
- Invertir en conocimiento.
- Realizar cambios a largo plazo en la estructura económica.
- Mejorar los equipamientos de alto valor añadido.
- Estimular la I+D en el sector privado.
En España, tenemos grandes investigadores. Nos sobra creatividad e innovación, pero nos cuesta materializarla.
De los países de nuestro entorno, España es un país en el que crece constantemente el número de documentos científicos publicados, pero nos cuesta traducir todo esto a innovación.
Sin embargo, no debemos desanimarnos, ya que tenemos sonados éxitos. Por ejemplo, hemos sido capaces de situar nuestra tecnología en Marte, en donde el rover Perseverance ya analiza la atmósfera marciana gracias a la estación meteorológica MEDA. Esta estación es la tercera que tenemos en el planeta rojo, un récord mundial que se ha conseguido gracias al Centro de Astrobiología y el Instituto Nacional de Tecnología Aeroespacial.
Pero, para mejorar en innovación, es fundamental detener la sangría de investigadores que abandonan nuestro país. Ya que, tenemos talento, lo formamos en nuestras Universidades, para luego dejarlo marchar ante la falta de salidas laborales en nuestro país, o por la precariedad laboral en la que se encuentran.
Diferencias entre creatividad e innovación
La creatividad es fundamental para la innovación. Pero no es lo mismo ser creativo y tener ideas, que ejecutar estas ideas y traducirlas en innovación.
- La creatividad es un proceso mental, mientras que la innovación es un proceso productivo.
- La creatividad no se puede medir, mientras que la innovación sí.
- Ser creativo es gratis, mientras que trasladar la creatividad a un proceso productivo que genere innovación, requiere de capital.
- La creatividad es un proceso flexible, que permite generar distintas alternativas, mientras que la innovación es más rígida, al tener que traducir la creatividad en acciones concretas.
Por lo tanto, si queremos estar en el pelotón de cabeza de los países innovadores de la UE y a nivel mundial, es preciso ejecutar una política equilibrada de inversión y apoyo a los sistemas nacionales de investigación e innovación, que contemple acciones tanto del sector público como del privado.
Nota del editor: Este artículo fue publicado en 2021 y actualizado a 2022 por su relevancia.
Fuente info
Autor: Jose Ramón Fernández de la Cigoña