Que el usuario esté satisfecho con la experiencia de uso de un producto digital es muy importante. Pero, ¿consideramos también a la Experiencia del Desarrollador como parte esencial en el proceso de implementación de dicho producto?
Para que un proyecto brinde los resultados esperados, el trabajo en equipo debe ser un todo, y no un hecho aislado. En sí, al momento de generar un producto digital, hay varias partes involucradas: negocio, marketing, diseño, contenidos, desarrollo. Y si bien son muchas más, la cuestión aquí es saber que todas esas áreas deben convivir en armonía.
Si bien es un concepto bastante novedoso, es algo que debe tenerse en cuenta a la hora de diseñar y documentar. La Experiencia del Desarrollador o DX se centra en cómo un desarrollador o programador utilizará un producto, sus SDKs, sus bibliotecas, sus frameworks, su documentación, o sus APIs.
En sí, es un subconjunto de la Experiencia de Usuario que aplica a todas las facetas del desarrollo. Esto implica la facilidad de uso, la efectividad en la entrega del valor y la curva de aprendizaje como factores a evaluar a la hora de decidir qué elementos se utilizan para desarrollar.
La Experiencia de Usuario es un término muy utilizado en el mundo de la tecnología.
Siempre hablamos de la importancia de crear productos usables, accesibles y con una comunicación “humana” para lograr que las personas sientan una cercanía en la interacción. De hecho, al momento de diseñar, utilizar las 10 heurísticas de usabilidad es un gran pilar y un sustento esencial.
Ahora bien, al crear productos, intentamos poner el foco en los usuarios, es decir, en quienes usarán lo que estamos generando. Pero, ¿Qué pasa si lo que diseñamos está bien pero, al momento de la implementación, falla?
Si en UX nos ocupamos del usuario, en DX lo que más importa es la experiencia que el desarrollador tenga a la hora de dar esos últimos pasos antes que, por ejemplo, una app salga al mercado.
En este caso, el usuario final es el propio desarrollador y no quien utilizará un producto. Podemos verlo como un paso previo a que la experiencia total llegue a manos de las personas a las que fue destinada el proyecto.
En DX, el foco está puesto en las tecnologías que el desarrollador utiliza para que los productos cuenten con las pautas de usabilidad que se plantearon, sea en Design Sprint o en reuniones con stakeholders (personas involucradas en el negocio, diseño, marketing, etc.).
También, la importancia en la Experiencia del Desarrollador se plasma en que esas tecnologías que utiliza, sean las adecuadas para que pueda llevar a cabo sus tareas.
Para finalizar este apartado, veamos un ejemplo pero desde el punto de vista del desarrollador como usuario.
Un programa le permite a los desarrolladores de aplicaciones mucha más automatización y facilidad en su uso. Hace que empleen menos tiempo en las implementaciones y tengan mayor tiempo libre, o bien para ocupar en otros proyectos.
Por el contrario, para otro tipo de productos, deben utilizar un programa un poco menos intuitivo y antiguo, lo que les genera incomodidad e inconvenientes a la hora de las entregas finales o devoluciones. ¿Qué programa crees que elegirían para trabajar? La respuesta no es demasiado difícil.
¡Y este punto es fundamental!. La tecnología avanza cada día más, y por supuesto, la oferta de programas o aplicaciones especialmente hechas para desarrolladores, crece.
De hecho, los desarrolladores también necesitan mejorar sus experiencias, y ver mejorados los productos que utilizan diariamente para que su proceso de trabajo se perfeccione. ¿Y quién no quisiera encontrar programas que faciliten las cosas en vez de complicarlas?
A la hora de presentar un proyecto al equipo de desarrollo, la documentación que entregamos es un tema importantísimo. En ella, deberá estar detallado con minuciosidad todo lo que, como diseñadores, queremos que se vea reflejado en un producto.
Una buena y necesaria práctica es realizar un hand off, es decir, entregar un documento con parámetros de diseño que sirvan de mapa a los desarrolladores que tomarán el proyecto.
Básicamente, por estos puntos que creemos, son necesarios y esenciales:
- Sin un buen desarrollo de producto, no habrá una buena Experiencia de Usuario.
- Si esa Experiencia de Usuario no cumple con las expectativas de las personas, no habrá repercusión y el producto no tendrá el éxito esperado.
- Y si no tiene ese éxito esperado, las expectativas del negocio no se cumplirán.
- Como dijimos antes, en el caso de los programas creados para tal fin, los desarrolladores son usuarios. Y esos usuarios son los que harán que un producto funcione.
- Mientras más información detallada brindemos a quienes forman parte de un equipo de desarrollo, más rápido saldrá el producto que diseñamos.
- Asimismo, en todas las instancias pueden haber correcciones o modificaciones. Trabajar el feedback es primordial para no crear molestias ni malentendidos.
La suma de todas las buenas experiencias harán que un producto funcione ¡y el usuario final lo nota, aunque no lo creas!
En resumen
La Experiencia de Desarrollador va muy de la mano con la UX y, es esencial en el proceso de diseño y construcción de un producto.
Cuando menor sea el tiempo que los desarrolladores dediquen a investigar herramientas, entender los conceptos plasmados desde el equipo de diseño, e implementar con objetivos claros, mucho más eficaz será esa experiencia.
Y esa buena Experiencia del Desarrollador se verá en los resultados finales: productos más intuitivos, menos horas invertidas en trabajo y mayor satisfacción con el entorno laboral.
¡A continuar ofreciendo experiencias que coloquen a las personas en el centro, sean usuarios o desarrolladores!
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Autor: WOW! Customer Experience
